Nuestro rol como padres también incluye propiciar un ambiente de sueño adecuado, ya que de esta manera cuidamos el descanso de nuestro bebé y logramos que tenga un sueño reparador.

Existe un ambiente ideal, o al menos recomendable, para favorecer el descanso, tanto durante las siestas como por las noches. Su cuidado ayuda a conciliar fácilmente el sueño, a mantenerlo y a mejorar su calidad.

Los tres factores clave son:

  • OSCURIDAD: La ausencia de luz permite al ritmo circadiano en desarrollo evolucionar y, al cuerpo, comenzar a producir melatonina, la hormona del sueño. El cuarto debe estar lo más oscuro posible, tanto en la noche como en las siestas.
  • SILENCIO TOTAL: Debemos evitar los ruidos que puedan sobresaltar y despertar a nuestro bebé. Es importante respetar su descanso generando un ambiente de silencio. Si por alguna razón tu casa es ruidosa -hermanos, ruido de la calle, perro-, lo que podés hacer es usar ruido blanco. El ruido blanco es un sonido constante, homogéneo, que se utiliza para enmascarar y neutralizar ruidos molestos. Existen dispositivos específicos para crear el ruido blanco y también apps para el celular.
  • TEMPERATURA: Los bebés duermen mejor en un ambiente con temperatura entre los 20 y 23 grados. Hay que evitar tanto abrigarlos de más como el uso de mantas o frazadas. Siempre conviene usar bolsitas de dormir, asegurándonos que están lo suficientemente abrigados y seguros.


Si queres saber más, o necesitas ayuda, consulta con @licmariaguastavino.