Levante la mano quien haya escuchado en boca de familiar o amigo: "Cansalo bien durante el día, así después cae rendido a la noche".

Estoy segura que a la mayoría le dijeron alguna vez esta frase bien intencionada pero totalmente errónea. Igual de convencida estoy de que nunca nadie les dijo: "No le des de comer en todo el día, así te come bien a la noche". Evidentemente, esas palabras nos resultarían ridículas y hasta malvadas. Así deberían resultar también las vinculadas al sueño 💤.

Hago la analogía porque el sueño de nuestros hijos se debería atender y cuidar tan bien como su alimentación. Siempre que escucho que un 👶 duerme mal de noche empiezo por preguntar sobre su sueño durante el día. Ahí es donde hay que poner el foco.
Las siestas responden a necesidades biológicas, al desarrollo neurológico y hormonal, y también a la cultura y la dinámica familiar. Hay que saber que el cerebro de los bebés tiene mucha actividad sináptica y por eso son menos capaces de tolerar largos períodos de tiempo despiertos. Por lo tanto, la siesta, o la falta de ella, afecta su comportamiento.
A medida que crecen, la cantidad de horas de sueño diurno que debe tener un bebé va en disminución, pero hay ciertos factores a los que siempre conviene estar atentos:

🔶AMBIENTE: Hasta la semana 8, el bebé debe dormir las siestas en una habitación iluminada en la que pueda oír los sonidos del día. A la noche deberá hacerlo en un lugar oscuro y silencioso. El objetivo es que empiece a diferenciar el día de la noche. Después de la semana 8 el ambiente de sueño para las siestas debe ser igual que a la noche: oscuro, silencioso, temperatra agradable.
🔶LUGAR DONDE DUERME: Lo ideal es que duerma su siesta en el lugar mas cómodo y seguro que es su cuna. El cochecito o la sillita del auto no son recomendables para dormir, el sueño en movimiento no es igual de reparador. Por supuesto en ocasiones va a dormirse en el cochecito o sillita del auto pero tratá de que no sea algo habitual.
🔶VENTANAS Y SEÑALES DE SUEÑO: Mira siempre a tu bebé y guiate por sus señales de sueño. Prestá atención a las ventanas de sueño que también te van a ayudar a saber cuando es probable que tu bebé necesite hacer una siesta.
RUTINA: Realiza una mini rutina antes de las siestas, por ejemplo: cambiar pañal, arreglar el cuarto, cantar una canción.